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dijous, 19 d’octubre del 2017

Ètica politica --- Ética política

[Entrada 187]

Ètica politica

[...] a Espanya vaig veure per primera vegada notícies de premsa que no tenien cap relació amb els fets, ni tan sols la relació que es pressuposa en una mentida corrent. [...] En realitat vaig veure que la història s'estava escrivint no des del punt de vista del que havia passat, sinó des del punt de vista del que havia d'haver passat segons les diferents «línies de partit». [...] Aquestes coses em semblen aterridores, perquè em fan creure que fins i tot la idea de veritat objectiva està desapareixent del món. Al capdavall, és molt probable que aquestes mentides, o en qualsevol cas altres equivalents, passin a la història.

George Orwell, Homenatge a Catalunya.
Tony Judt en el llibre Thinking the Twentieth Century (Pensar el segle XX) assegura que als EUA es va produir un canvi important entre el cas Watergate i la Guerra de l'Iraq. En el primer cas el president va ser forçat a dimitir per les seves mentides i el joc brut amb què havia aconseguit la presidència. En el segon, a Bush fill se li va tolerar que declarés una guerra basant-se en falsedats evidents. Judt raona, a la llum d'aquests dos fets que als EUA la política ha deixat de banda l'ètica entre un esdeveniment i l'altre. Un període que coincideix amb la irrupció de l'ultraliberalisme a la política americana, que s'inicià amb Nixon, però que va entrar amb força amb la presidència de Reagan.

Els estudiosos de la història defensen que els fets admeten versions i que per tant es poden explicar moltes històries a base d'uns mateixos fets. En el món científic es parla de consensuar entre les diferents versions, la que sembla més versemblant, més objectiva, tenint en compte tots els elements que conflueixen en un fet. Per això aquesta versió consensuada pot ser modificada a la llum d'una nova descoberta o de la relectura d'un determinat document.

Això permet que es pugui fer una història a mida, i que, segons com s'interpretin els fets i els elements dels quals es disposa, se'n pugui treure una versió o una altra. Se sap que fins i tot s'ha arribat a falsificar documentació per donar un cert sentit a la història. Quan no es té interès en aquella "veritat objectiva" que esmenta Orwell, sinó que el que es busca és justificar alguna cosa, les interpretacions de la història resulten sospitoses, per no dir falses.

En el món polític es busca sovint l'aval de la història per donar força al seu argumentari. Se sap que avui dia hi ha estudiosos de la història que, amb una manca total d'ètica, estan al servei de determinades línies polítiques posant la història al servei del seu ideari, estudiosos que són els que conceben la majoria de les versions sospitoses que esmentava.

Sens dubte la societat té assumits aquests fets, tant la falta d'ètica i de principis de molts dels polítics d'èxit, com les versions falsejades de la història. A mi sempre em sorprèn i no deixarà de sorprendre'm que no fem res per acabar amb aquestes coses.

Una abraçada.








Ética política

[...] en España vi por primera vez noticias de prensa que no tenían ninguna relación con los hechos, ni siquiera la relación que se presupone en una mentira corriente. [...] En realidad vi que la historia se estaba escribiendo no desde el punto de vista de lo que había ocurrido, sino desde el punto de vista de lo que tenía que haber ocurrido según las distintas «líneas de partido». [...] Estas cosas me parecen aterradoras, porque me hacen creer que incluso la idea de verdad objetiva está desapareciendo del mundo. A fin de cuentas, es muy probable que estas mentiras, o en cualquier caso otras equivalentes, pasen a la historia.

George Orwell, Homenaje a Cataluña.
Tony Judt en el libro Thinking the Twentieth Century (Pensar el siglo XX) asegura que en EEUU se produjo un cambio importante entre el caso Watergate y la Guerra de Irak. En el primer caso el presidente fue forzado a dimitir por sus mentiras y el juego sucio con el que había conseguido la presidencia. En el segundo, a Bush hijo se le toleró que declarara una guerra basándose en falsedades evidentes. Judt razona, a la luz de estos dos hechos que en EEUU la política ha dejado de lado la ética entre un suceso y el otro. Un periodo que coincide con la irrupción del ultraliberalismo en la política estadounidense, que se inició con Nixon, pero que entró con fuerza con la presidencia de Reagan.

Los estudiosos de la historia defienden que los hechos admiten versiones y que por tanto se pueden explicar muchas historias a base de unos mismos hechos. En el mundo científico se habla de consensuar entre las diferentes versiones, la que parece más verosímil, más objetiva, teniendo en cuenta todos los elementos que confluyen en un hecho. Por ello esta versión consensuada puede ser modificada a la luz de un nuevo descubrimiento o de la relectura de un determinado documento.

Esto permite que se pueda hacer una historia a medida, y que, según cómo se interpreten los hechos y los elementos de los que se dispone, se pueda sacar una versión u otra. Se sabe que incluso se ha llegado a falsificar documentación para dar cierto sentido a la historia. Cuando no se tiene interés en aquella "verdad objetiva" que menciona Orwell, sino que lo que se busca es justificar algo, las interpretaciones de la historia resultan sospechosas, por no decir falsas.

En el mundo político se busca a menudo el aval de la historia para dar fuerza a su argumentario. Se sabe que hoy en día hay estudiosos de la historia que, con una falta total de ética, están al servicio de determinadas líneas políticas poniendo la historia al servicio de su ideario, estudiosos que son los que conciben la mayoría de las versiones sospechosas que mencionaba.

Sin duda la sociedad tiene asumidos estos hechos, tanto la falta de ética y de principios de muchos de los políticos de éxito, como las versiones falseadas de la historia. A mí siempre me sorprende y no dejará de sorprenderme que no hagamos nada para acabar con esas cosas.

Un abrazo.


2 comentaris:

  1. Tenemos un término que se ha hecho bastante popular últimamente para explicar este tipo de dinámicas que es el de "posverdad" . Esto viene a sugerir que de manera más o menos voluntaria hemos consentido en alienar nuestras conciencias como forma de entender la realidad.

    Tal y como yo lo veo, este problema trasciende al de la historia que relatan unos u otros, creo que es una cuestión de pereza (tal vez pobreza) intelectual, la de una sociedad en la que casi nadie lee libros, en la que afrontamos cuanto sucede sin haber articulado nuestro pensamiento de manera útil para poder razonar, de gente que entiende el mundo a través de las "verdades" de Twitter o de los videos de YouTube. Gente que no permite el espacio para la reflexión más elemental o para la más mínima discrepancia.

    Siento que más allá de cualquier "verdad objetiva", en algún momento decidimos que adquirir conocimiento ya no implicaba el cuestionamiento constante de la propia ideología, de las creencias sociales o del desafío a la autoridad. Preferimos basar nuestras verdades en conceptos erróneamente simples y en interesados modelos unívocos y estáticos que tienden a la confrontación, ignorando que la realidad es un proceso dinámico que interacciona y se transforma continuamente para adquirir significado.
    En estos días es fácil encontrar a quien invoca "la legalidad" pero no defiende el respeto a la ley, sino la sumisión total a la autoridad del poder, o a quien invoca "la libertad" significándola en un ejercicio de introspección y renuncia. La negación a la oportunidad de observar el mundo e interrogarlo abriéndos al diferente en una búsqueda conjunta.
    Unos y otros se disputan "la democracia".

    Probablemente la verdad ojetiva ni exista más allá de la ciencia pura, pero lo que es seguro es que ya no interesa a casi nadie.

    Un abrazo
    Pucho

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    1. Si uno escucha a los pensadores actuales esa objetividad, esa verdad objetiva, está fuera del alcance de las capacidades del individuo, según ellos la realidad es una percepción personal y en consecuencia hay tantas realidades como personas. Denominan "lo real" a lo que hasta hoy habíamos llamado la realidad objetiva. A Pesar de eso yo creo que podemos acercarnos mucho a eso que llaman "lo real" con todas las limitaciones que que aún tenemos y que no son pocas. Eso es persigue la ciencia en una labor colectiva. Y creo que la sociedad puede hacer lo mismo. Como sucede con una jugada polémica de un partido de fútbol, la tecnología actual en imagen nos permite dar-nos cuenta de aquello que o habíamos percibido en directo y nos permite hacernos una idea mucho más próxima a lo que en realidad sucedió. Quiero decir que si hubiera un interés colectivamente seriamos capaces de aproximarnos mucho a la realidad objetiva ya que cada día hay más medios a nuestro alcance para conseguirlo.

      No me preocuparía mucho que la sociedad no leyera si hubiera substituido eso por otro recurso equivalente como conferencias gravadas en vídeo u otros recursos accesibles en Internet, además a veces es peor leer que no hacerlo, según lo que se lea. Hay mucha parte de la población que no ha sido capaz de otra cosa que leer novelas... Y hay algunas novelas que es mejor no leer. Lo grave es que como comentas nos quedemos con los twits y el whatsapp.

      El tema es que parece que hay mucho interés en que el debate social y que la reflexión personal se produzcan, que se prefiere que no existan. Que se transmiten a la población esas "postverdades" para conseguir efectos determinados, orientadas a determinados intereses. Y hayan una fracción de la población que sea capaz de creer cosas de lo más absurdas como que haya escuelas públicas que adoctrinen niños en el odio y que la población razonable y bien intencionada (que aún existe) lo tolere...

      Muchas gracias por tu colaboración.

      Un abrazo.

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